Expresiones con nombres de pueblos (IV): Quien fue a Sevilla, perdió su silla

Por pepecar.com

Más que con nombre de pueblo, en esta ocasión la expresión a la capital de Andalucía. La expresión “Quien se fue a Sevilla, perdió su silla” se utiliza para describir el momento en el que alguien dejó libre una plaza y pretendió recuperarla tras su ausencia. En definitiva, la usamos para avisar a alguien que puede perder unos determinados privilegios si abandona el lugar en el que los posee.

Como ocurre con muchas expresiones coloquiales, el uso popular ha modificado esta expresión, probablemente por economía del lenguaje y favorecido por una transmisión oral de la misma, ya que en los dichos más antiguos se refleja que en realidad era “Quien se fue de Sevilla, perdió su silla”, tal y como se refuerza de la historia que parece dio origen a esta expresión.

Se cuenta que en el siglo XV, durante el reinado de Enrique IV, un sobrino de don Alonso de Fonseca, arzobispo de Sevilla, fue nombrado arzobispo de Santiago de Compostela. En aquellos tiempos el reino de Galicia estaba revuelto, y éste le pidió ayuda a su tío para la pacificación, antes de hacerse con el arzobispado de Santiago. Mientras, él se haría cargo del arzobispado de Sevilla.

Don Alonso de Fonseca viajó entonces a Galicia con la intención de pacificarla, cosa que logró. Pero cuando regresó a Sevilla se encontró con la desagradable sorpresa de que su sobrino le había usurpado la silla del arzobispado. Tras un mandato del Papa, la intervención del rey y algunos de sus seguidores ahorcados, pudo don Alonso de Fonseca recuperar su cargo.

Como curiosidad, y como ya hemos visto que ocurre en otras ocasiones con el traspaso de una expresión a otros países hispanohablantes, en este caso en México se dice “Quien se fue a la Villa, pierde su silla”, siendo la Villa el recinto de la Vírgen de Guadalupe. Otros países latinoamericanos también han hecho sus adaptaciones. ¿Conoces alguna?

Vía: Las Frases para hoy

Imagen: Flickr / J. A. Alcaide