Playas de Portugal (V): Porto Santo, en Madeira

Por pepecar.com

Porto Santo

La Isla Dorada, así es como llaman a Porto Santo los habitantes de Madeira. Es pequeña y no muy conocida. Sin embargo, Porto Santo posee todo el encanto del archipiélago portugués ubicado frente a las costas africanas. Su larga playa de arena blanca, de unos nueve kilómetros apenas si cuenta con unos pocos establecimientos de hostelería y constituye uno de esos pocos paraísos que quedan por descubrir en el continente europeo.

En los últimos años se han comenzado a despertar para dotar de mejores infraestructuras a una isla que en nada se parece a su hermana Madeira. Esta última es todo frondosidad tropical y, sin embargo, Porto Santo es conocida por su origen volcánico, que la emparenta más con lugares como la canaria Lanzarote.

La isla fue descubierta por navegantes portugueses en 1418, quienes decidieron bautizarla con el nombre de Porto Santo al haberles proporcionado refugio contra una descomunal tormenta. Durante un tiempo, además, este lugar fue la residencia del mismísimo Almirante Cristóbal Colón.

Porto Santo

Hoy es un lugar encantador en el que relajarse y disfrutar. Podemos acercarnos en avión o a través del ferry que la une con Madeira y disfrutar de la suavidad de su clima en cualquier época del año.

Precisamente el aislamiento que ha mantenido durante tanto tiempo ha permitido conservar intacta muchas de las tradiciones locales originarias. En el campo de la gastronomía este es un hecho incuestionable y una de las mayores delicias es disfrutar de los platos tradicionales.

Los hoteles de la zona han conseguido un buen nivel de calidad y ofrecen bastantes alicientes al turista, además de la hermosa playa portuguesa: buceo, pesca, windsurf, voley, tenis, paseos a caballo y… golf.

Tal vez si te decides por visitar Porto Santo, te sea útil contar con información sobre el alquiler de coches en Madeira, una buena manera de recorrer el archipiélago.

Fotos en CC: Flickr/Joao Maximo