Otras formas de optar a un coche de sustitución: clubes de automovilistas y fabricantes

Por pepecar.com

En artículos anteriores ya nos hemos referido a diversos aspectos relacionados con los coches de sustitución. Hemos hablado de las condiciones y plazos que se nos exigen al contratar la póliza con una compañía de seguros, pero las aseguradoras no son la única forma de optar a este servicio: las asociaciones de conductores o los distintos fabricantes de automóviles suelen ofrecer un coche de sustitución en determinados casos.

De todas formas, y como ya os hemos advertido en anteriores ocasiones, antes de hacer una contratación adicional conviene hacer una reflexión de hasta qué punto nos va a salir rentable. Podemos evaluar el uso que le damos a nuestro vehículo: si hacemos muchos kilómetros, si lo utilizamos expresamente para el desempeño de nuestro trabajo, etc, ya que según qué tipo de conductor seamos nos sale mucho más rentable alquilar un vehículo de manera puntual en caso de que no podamos disponer del nuestro, ya que hoy en día existen compañías de alquiler de coches baratos que no suponen para nada un importante desembolso.

El Real Automóvil Club de España (RACE), el Real Automóvil Club de Catalunya (RACC) o el Comisariado Europeo del Automóvil (CEA) ofrecen vehículos de cortesía a sus asociados en caso de necesidad, pero optar a un coche de sustitución por esta vía posee sus limitaciones, pues lo suelen prestar por un breve periodo de tiempo y después debe ser el asociado el que se haga cargo de los gastos. Además, suele ser condición necesaria que quien se beneficie de este servicio repare su coche en la red de talleres del club al que pertenezca.

Al margen, las asociaciones nos permiten contratar pólizas aparte. Por ejemplo el RACE ofrece el seguro de vehículo de sustitución en dos modalidades de contratación: en caso de accidente o robo, o en caso de accidente, robo y avería. La primera de ellas incluye extensión de la defensa jurídica a aquella de la que ya se disponga por el seguro del automóvil, segunda peritación en caso de desacuerdo y defensa por controversias con otros seguros contratados en caso de siniestro. La segunda modalidad incluye además los daños materiales ante un caso de insolvencia por parte contrario culpable y la reclamación al taller en caso de reparación defectuosa del vehículo.

Por su parte, el CEA ofrece un servicio de coches de sustitución por un tiempo limitado a un precio exclusivo para socios en caso de que su vehículo se estropee, se halle en el taller, o tarden en entregarle el nuevo vehículo en el concesionario. El CEA ofrece kilometraje ilimitado, incluye cargos como conductor adicional o conductor joven, el coche no tiene franquicia por colisión o robo y se puede devolver en otra base en España distinta a la de la recogida.

Pero hasta un coche de sustitución podemos llegar también a través del concesionario en el que compramos nuestro vehículo, pues algunas marcas de coches ofrecen este servicio si el recién adquirido vehículo sufre una avería que esté cubierta por la garantía contractual, que se extiende durante los dos años siguientes a la compra.

No obstante, este servicio también se encuentra sujeto a limitaciones. Algunas marcas lo limitan por días, otras sólo te cubren si te ocurre durante el viaje, si la reparación dura más de 24 horas, etc. Es necesario tener en cuenta que se trata de un servicio que no está regulado por ley, por lo que cada fabricante aplica sus propias condiciones.

Imagen: Wikimedia Commons / James086Geograph / Peter Facey