Lada 2107, el coche comunista que sigue siendo líder de ventas en Rusia

Por pepecar.com

¡Las cosas ya no se hacen como antes! ¿Cuantas veces hemos escuchado decir esta frase a nuestras madres o abuelas? Y lo que es peor… ¿no la habéis pronunciado vosotros también en los últimos tiempos? Bueno, pues aún quedan cosas como las de antes en este mundo nuestro, aunque parezca increíble, y una de ellas es el Lada 2107.

Este coche, que los que tenemos ya algunos añitos recordamos perfectamente circulando por nuestras calles, sigue siendo uno de los coches más vendidos en Rusia, y su éxito parece no haber decaído desde su creación en 1982.

El Lada 2107 comenzó a fabricarse en Togliati, cuando aún quedaban unos cuantos años para la caída del Muro de Berlín, por lo que podemos decir que este coche fue hijo de la Rusia comunista, y precisamente por ello fue ideado para ser resistente, sencillo, duradero y barato, cualidades que aún hoy conserva y que son muy valoradas por gran parte de los rusos, por lo que se sigue fabricando con muy pocas modificaciones y se ha convertido en uno de los coches de producción más antigua del mundo.

Tal vez hayáis escuchado hablar de lo que se conoce como obsolescencia programada, o cómo con la adopción del sistema capitalista los fabricantes comenzaron a limitar la vida útil de los productos para favorecer que quedaran pronto obsoletos y que el consumidor debiera comprar más, repercutiendo en que se fabricara más para ir engordando el sistema capitalista.

Bien, pues en contra a ese modelo se hallaba la Unión Soviética, que fabricaba bombillas que duraban toda la vida y neveras con una garantía mínima de 40 años. Os cuento esto para que os hagáis una idea de en qué contexto nace este Lada 2107, creado para que durara y resistiera las bajas temperaturas. Y aunque no venga a cuento, os recomiendo que veáis online el documental Comprar, tirar, comprar, que habla sobre la obsolescencia programada.

Sabéis que cada día es más difícil que localicemos un problema mecánico por nuestra cuenta, pues los coches nuevos incorporan centralitas y blindan muchas de las partes del motor, para que nos sea imposible indagar y debamos llevarlo a un taller de la marca, donde es un ordenador el que diagnostica el problema. Pues bien, esta es una de las razones por las que el Lada 2107 sigue levantando pasiones, pues su sencilla y accesible mecánica permite que alguien medianamente entendido realice una reparación o localice una avería por su cuenta.

Como curiosidad, tanto este como otros modelos de Lada anteriores a él, son coches que han sido y son muy utilizados tanto por el pueblo cubano como por sus dirigentes y policías, ya desde los años 70, cuando se volvieron muy populares durante la “era soviética” cubana. Es por ello que hoy, quien pasee por La Habana, verá como un gran número de Ladas conviven con sus antecesores en la isla, los Ford, Chevrolet, o G.M.C., de los años 50 y 60 que aún resisten desde los tiempos en los que se vivía en Cuba la “era americana”.

Imagen: Car Scoop; IPZone; Nirudia

Vía: SZAuto