Son más de 70 los coches de lujo que conforman el parking móvil de la Casa del Rey. Juan Carlos I comenzó su colección a finales de la década de los 60 con un Mini 1275C que le costó alrededor de 100.000 pesetas de antaño. Las últimas incorporaciones a la flota del rey han sido dos Ferrari, regalados por el jeque de Emiratos Árabes, Mohamed bin Rashid al Maktoum, valorados en más de 500.000 euros.
La colección de coches de lujo del rey de España es considerada una de las más importantes del mundo, aunque en realidad los vehículos pertenecen al Patrimonio del Estado. Eso sí, solo el rey y sus familiares pueden utilizarlos, así que de poco sirve que sean públicos y los mantengamos entre todos…
Los lujosos modelos duermen en el Parque Móvil del Estado, en distintos garajes repartidos entre La Zarzuela, El Pardo y el Palacio de Oriente. Entre ellos figuran auténticas piezas de antología, como el coche en el que apareció la Princesa de Asturias el día de su boda. Era un Rolls Royce Phantom IV, un modelo de 1950 que se lanzó al mercado con motivo del aniversario de bodas de la reina de Inglaterra y del que solo se hicieron 18 ejemplares, uno de ellos, el del rey, adquirido por Franco en aquellos años.
Maybach Côte d’Azur 57S, un Audi RS6, un Audi A8, un Porsche 959, dos Nissan 350Z, un Mercedes SL55 AMG, un montón de todoterrenos y, por supuesto, impresionantes motocicletas, entre las que destacan su Harley Davinson y una MV Augusta; forman parte de una colección del Patrimonio Nacional del rey, que se encargan de cuidar unas 65 personas.