Los primeros Camping-Cars

El veranito ya está a la vuelta de la esquina y muchos españoles andan programando su etapa de vacaciones en familia, que ya va siendo hora después de un año tan duro. A muchos las vacaciones perfectas les llegan de la mano de las autocaravanas que, con las modernidades y los nuevos avances tecnológicos, han llegado a convertirse en auténticas casas a cuestas, en las que priman todas las comodidades y el máximo confort.

Desde las típicas roulots, unidas a nuestro utilitario a través del enganche; hasta autocaravanas pequeñas, psicodélicas y hasta del tamaño de un enorme autobús, las posibilidades resultan innumerables y todas ellas nos tienen guardadas multitud de posibilidades de ocio para las vacaciones.

No obstante, esta costumbre cada vez más extendida de disfrutar las vacaciones en familia y de manera móvil, no es exclusiva de los tiempos modernos y, aunque los antiguos ya hacían sus pinitos con sus viejos carromatos, desde que el mundo motorizado existe, las ganas del conductor de llevar la casa a cuestas han sido paralelas.

Mirad estas fotografías pertenecientes a la colección de la Library Of Congress. Fueron tomadas a principios del siglo XX, concretamente entre 1910 y 1915 y nos muestran las invenciones del ingeniero Thomas Coleman du Pont, en su intento por conseguir algo más que un prototipo de camping-car.

Hemos de reconocer que a du Pont le quedó más una especie de tienda de campaña con coche interior, pero algo es algo, sobre todo cuando se trata de pioneros sobre el mundo del motor.