Balneario Aisia Lekeitio, relaja tu cuerpo y alimenta tu espíritu
//= get_the_date() ?>Por pepecar.com
Tranquilidad, relax, silencio… tan sólo el murmullo del agua golpeando nuestro cuerpo, salpicando nuestro tiempo. El fin de semana se presenta lluvioso en toda España, de modo que el mejor plan que se me ocurre para no mojarse, es meterse en el agua. ¿Qué tal si nos damos un capricho y nos escapamos a un balneario?
Los balnearios han ido ganando terreno los últimos años y se perfilan como la mejor opción para eliminar las impurezas del cuerpo y del alma. La demanda de tratamientos de spa y baños en aguas termales va en aumento, entendidos como lugares donde alcanzar el bienestar corporal y la placidez de espíritu.
Mucha gente practica lo que ya se conoce como turismo de balneario, es decir, que en lugar de acudir a relajarse a un spa cercano a casa, se busca el valor añadido de un cambio de aires y, a ser posible, en un lugar de gran belleza natural. En esta descripción encaja el Balneario Aisia Lekeitio, en la localidad vasca de Lekeitio, que ofrece la posibilidad de alojamiento, ya que se encuentra dentro de un hotel.
Lekeitio es un pueblo pesquero ubicado en un extremo del Golfo de Vizcaya que atesora importantes joyas góticas y amplias playas. Para llegar hasta él podemos recurrir a un servicio de alquiler de coches en Bilbao, pues se haya a unos 60 kilómetros de la capital bilbaína. Si partimos de la calle Arenchavaleta, cogeremos por la cercana calle Autonomía Kalea por donde discurre la A-634 que nos conducirá a la A-8 y nos pondrá en la dirección correcta.
Asomado al mar Cantábrico, el hotel Aisia Lekeitio se alza sobre las ruinas del antiguo palacio Uribarren, donde vivió durante su exilio Lekeitio, última emperatriz del imperio austro-húngaro, por lo que cada rincón del lugar evoca una historia.
Su centro de Spa, basado en la talasoterapia, utiliza el agua marina como método terapéutico y elementos del mar como algas o barros. El centro, dedicado al relax y la belleza, se extiende a lo largo de 800 metros cuadrados y sus tratamientos también buscan fines terapéuticos con la prevención y mejoría de dolencias circulatorias, locomotrices o respiratorias.
Lekeitio es un pueblo de gran tradición marinera, de gente amable y acogedora y costumbres ancestrales. Su arquitectura es de un elevado valor, y el visitante no debe olvidar conocer edificios como el Ayuntamiento, el Palacio de Oxangoiti, el Palacio Uribarren, los restos de la antigua muralla cortafuegos del siglo XV, Upaetxea o la Cofradía de Pescadores de San Pedro. Si deseamos movernos por los alrededores podemos visitar lugares como Gernika, Berriatua, Ondarroa y Markina.
Lekeitio posee una gran variedad de bares y restaurantes donde disfrutar con los mejores “pintxos” y la gastronomía tradicional, basada en la cocina marinera que ofrecen restaurantes como el Mesón Arropain Jatetxea, con especialidad en marisco o el restaurante Zapirain, en el casco antiguo, que usa materias primas frescas y de temporada entre las que destacan las carnes y pescados. La mejor cocina vasca podremos degustarla en los restaurantes Oxangoiti, Nerea y Egaña.
Imagen: Aisia Hoteles; Viajes Nireblog