Un paseo por la Judería de Córdoba

Hoy toca escapadita al sur y con un sol de lujo decido alquilar un coche y darme el capricho de pasear por unos de los cascos históricos con más solera de Andalucía, la famosa Judería de Córdoba. Tirad millas y venid conmigo que por esta zona todos los ojos son pocos para llevarse tanta belleza.

Un revoltijo de callejuelas encaladas y empedradas donde no vamos a tener tiempo para el aburrimiento. ¿Cultura? ¡Toda! ¿Historia? ¡Ni te cuento! ¿Tapitas? ¡Te mueres de ricas! ¿Un souvenir? ¡Estamos en el sitio adecuado! Pues venga, que tenemos que aprovechar el tiempo por las calles cordobesas.

Estamos a un paso de la Mezquita más famosa de España, donde tengo que sacar un pedazo de foto de ese imponente paisaje de arquería bicolor que encendía mi imaginación en mis libros de pequeño, imaginando leyendas e historias a lo 1001 Noches… ya ves tú, cómo simplificaba yo todo un Patrimonio de la Humanidad.

Por cierto, que también lo es el casco antiguo de la ciudad y no me extraña. En cuanto ponemos un pie en la calle, lo difícil es no dejarse conquistar por cualquier rincón cordobés, por muy pequeñito que sea y mira que cuesta no colarse en los zaguanes y meterse en uno de esos patios cordobeses, que también han conseguido la declaración de Patrimonio Inmaterial. No me extraña, esas macetas, esas plantas, ese colorido, esa delicadeza y tantísimo cuidado. Imaginaos en mayo, cuando se celebra la Fiesta de los Patios… ¡Esto debe ser un no parar!

Ante de pararme en alguno de los muchos bares y restaurantes que se aglutinan en esta zona de Córdoba y dar buena cuenta de un típico salmorejo cordobés, voy a echar un vistazo a algunos de esos edificios palaciegos tan impresionantes y, como no puedo visitarlos todo en tan poco tiempo, me quedo con el Palacio de Viana, una casa-museo de estilo manierista y declarado Monumento Histórico Artístico Nacional y Jardín Artístico.

Me quedan un montón de cosas por visitar, que esta ciudad es cuna de civilizaciones y aquí dejaron su huella los pueblos más notables pero… ¡tengo hambre y voy a por ese salmorejo! ¡Nos vemos en Córdoba!

No olvides que si quieres descubrir otros lugares de igual belleza, nuestro post sobre una ruta en coche por Andalucía es perfecto para ti.

Fotos en CC: Wikimedia Commons/Paul Asman and Jill Lenoble; Flickr/gastromartini