Son éstas fechas de desplazamientos por carretera en las que toda la familia viaja a bordo de un vehículo, incluidos, por supuesto, los niños. Por eso queremos dedicar hoy unas líneas a ofreceros unas recomendaciones para que los más pequeños de la casa viajen seguros y no tengamos ningún susto. Y, así, podamos hacer los viajes en coche más cómodos con niños.
Los niños, niños son; de modo que es a nosotros a quienes nos toca velar por su seguridad y hacer todo lo posible por evitar ponerles en riesgo cuando viajan en un coche; sin ir más lejos, la utilización de un elevador o el bloqueo del elevalunas eléctrico o de la puerta del vehículo, son aspectos clave que no debemos olvidar nunca.
El primer aspecto al que nos queremos referir es al de las sillitas de bebé, un dispositivo primordial en la seguridad de los niños ya que reduce a más de la mitad el número de lesiones o muertes. Ya os hablábamos de los pormenores de estos dispositivos en el artículo Sillas de seguridad para bebés: tipos, precauciones y normativa o en nuestro post ampliado sobre sillas de coches para niños, donde os explicábamos cómo instalarla y os hablábamos de los tipos de sillas por edades, cómo debe ir el niño y de la importancia de su homologación. Es importante que no cambiemos a una silla superior mientras no sea necesario, ni que prolonguemos la vida útil de una sillita si el niño ya no tiene edad o tamaño para ir en ella.
Es muy importante también que seamos conscientes de la climatología y que no dejemos a un niño sólo en un vehículo cerrado por nada del mundo. Los niños pequeños son muy susceptibles a los golpes de calor, ya que el proceso de refrigeración de su cuerpo es diferente al de un adulto. Tengamos en cuenta que aunque en el exterior haga una temperatura de 15ºC, el interior del coche puede llegar a alcanzar los 43ºC, lo que resultaría muy peligroso para un bebé.
Lo mismo puede decirse de cuando la temperatura exterior es fría, pues podrían sufrir una hipotermia. Ni plantearnos eso de dejarlos con la calefacción encendida, máxime si se trata de un lugar con poca ventilación, pues podría intoxicarse con los gases del tubo de escape. Recordad que un niño no debe quedarse jamás en un vehículo sin la supervisión de un adulto.
Es también importante que bloqueemos los diferentes dispositivos de apertura de puertas y ventanas, ya que los niños podrían abrir el coche en marcha y llegar a caer de él. Importante es que desde pequeños les enseñemos que en los coches no se juega y evitemos por ejemplo que jueguen a meterse en el maletero, que nunca deben acercarse a coches en marcha ni colocarse detrás de un vehículo, o que tengan cuidado con las manos y no coloquen los dedos en las puertas.
Además, si nos tomamos el tiempo necesario en explicarle los peligros que pueden surgir en un vehículo, así como en asegurarlos en la sillita e incluso jugar con ellos a que se ponen el cinturón de seguridad (luego comprobaremos nosotros que está bien sujeto), estaremos contribuyendo a una valiosa educación vial y a una concienciación que difícilmente olvidarán en la vida. Merece la pena tomarse un tiempo, ¿no?
Además de merecer muchísimo la pena tener la posibilidad de educar a los más pequeños sobre la seguridad en el coche, otro aspecto que merece la pena es la posibilidad de viajar con niños a sitios especiales. Por ello, te recomendamos leer nuestros artículos sobre viajar a Lisboa con niños o vacaciones con niños en Navidad: Laponia, donde podrás encontrar información de calidad acerca de dos destinos de vacaciones inmejorables.
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