Esta semana ha entrado en vigor una nueva norma para el pago de las multas de tráfico en las instalaciones de las distintas jefaturas provinciales de Tráfico. A partir de ahora, las sanciones que se abonen en estos lugares solo podrán realizarse a través de tarjeta de crédito.
El establecimiento del pago con tarjeta pretende aumentar la seguridad en las dependencias de las jefaturas provinciales y evitar que en ellas exista dinero en metálico. Además de razones de seguridad, los responsables de la DGT han esgrimido el ahorro como la otra razón por la que ya no se podrá pagar con dinero en estas oficinas.
Al evitar la recaudación en las jefaturas provinciales, también se recortará la partida presupuestaria destinada al traslado y custodia de las cantidades recaudadas en las dependencias de cada provincia. El pago con tarjeta de las multas de tráfico también se puede realizar a través de internet, en la Oficina Virtual de la DGT, y llamando al 060. En ambos casos se requerirá al denunciado que aporte el número que de expediente que figura en la denuncia y el número de su tarjeta de crédito.
No obstante, para quienes prefieran continuar abonando las multas de tráfico en metálico, esta gestión podrá seguir realizándose en las oficinas de Correos y el Banco de Santander.
A pesar de que ambas fórmulas de pago han estado conviviendo en España durante los últimos años, a partir de 2011 la medida piloto comenzó a implementarse en Asturias, lugar que se tomó como base para estudiar si el pago con tarjeta también conseguía reducir las largas colas en las jefaturas provinciales y agilizar el proceso.
A partir de los resultados de la experiencia asturiana, la medida se extiende ahora al resto del territorio nacional.
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