Viajamos hoy hasta Málaga para encontrarnos con un nuevo paisaje de fantasía, y en esta ocasión nunca mejor dicho, pues esta enorme extensión de roca caliza bien podría haber sido el escenario del territorio de “los Comepiedra” de La Historia Interminable. Pero el Torcal de Antequera no se encuentra en Fantasía, sino en la localidad malagueña de Antequera.
En este lugar la erosión ha ido modelando la roca; agua, frío y tiempo que han otorgado a las rocas formas caprichosas. A lo largo de 20 kilómetros cuadrados de extensión, una muestra clara de lo que es el paisaje cárstico europeo. Para llegar hasta el Torcal de Antequera podemos optar por un servicio de alquiler de coches en Málaga.
Para hallar el origen del Torcal de Antequera debemos remontarnos al Jurásico y hacer un esfuerzo para imaginar cómo las rocas emergieron del fondo marino y fueron capaces de elevarse más de mil metros sobre el nivel del mar a causa de las fuerzas tectónicas. Esto ocurría hace 160 millones de años, aproximadamente. ¡Casi nada!
Emergió, por tanto, una gran masa de roca que se había formado por los sedimentos acumulados en el fondo del mar y en un principio adoptaron forma de champiñón. Fue el agua que se filtraba en las rocas que, al helarse, formaba cuñas de hielo que rompían las rocas e iban esculpiendo poco a poco estas formas imposibles.
También el dióxido de carbono del agua de lluvia contribuyó a la disolución del carbonato de calcio y favoreció la creación del maravilloso paisaje que se puede contemplar hoy.
Imagen: Wikipedia; NaufraBlogs; Lugares para Descubrir; Flickr / Luis Jimenez;