Qué hacer en Finisterre

Finisterre es un municipio español de la provincia de Coruña, perteneciente a la comunidad autónoma de Galicia que pertenece a la comarca de Finisterre, y cuyo nombre significa el fin de la tierra. Esta villa a menudo se señala como el lugar más occidental del continente, aunque geográficamente si que es el más occidental de la Península ibérica, pero el del mundo, en realidad es el Cabo da Roca, ubicado en Sintra, perteneciente a Portugal.

Foto de tour de Galicia

Si visitas Finisterre, te recomendamos quedarte por lo menos una noche, por lo que es importante conseguir un alojamiento con tiempo y, además, debes visitarlo en coche, ya que podrás moverte hacia los alrededores y descubrir fabulosos sitios en todo Galicia. Aquí, lo mejor es organizar toda una ruta, incluyendo pequeños rincones, miradores, acantilados, playas, restaurantes, pueblos con gran encanto e historia y mucho más; y entro ello no debe faltar Finisterre. A continuación, te mencionaremos algunas de las razones por las cuales visitarlo, pero te prometemos que existen muchas más.

Por ejemplo, una parada importante, sobretodo al atardecer es el Faro de Finisterre, el más importante de la Costa da Morte; la luz de este faro ha guiado a muchos marineros y pescadores desde 1868; el peligro de la zona ha hecho que cobre muchas vidas a lo largo de los años, de ahí su nombre; pero fuera de esto también te regala preciosos atardeceres, de los más espectaculares de Galicia.

Otro punto es que en este lugar puedes recorrer la última etapa del Camino de Santiago, esta ruta milenaria acaba, en realidad, en Fisterra, ante el mar, exactamente en el Monte de Finisterre, señalado como el kilómetro cero, donde los caminantes visitan la iglesia de Nuestra Señora de las Arenas, donde se ubica O Cristo de Barba Dourada, el Santo Cristo de Finisterre. Aquí, tras cumplir la tradición suelen quemar ropas, bañarse en el mar, tomar una concha de vieira para “volver a nacer”.

Explorar el casco histórico de Finisterre es una parada obligada, seas peregrino o no, sus calles medievales son preciosas, se escuchan los embistes del viento, los quejidos de las gaviotas y el ruido de las olas de fondo que acompañan las vistas de sus fachadas de piedras gris con grandes cristaleras, pequeñas capillas, plazuelas, etc; hasta llegar a la Lonja del pescado y el pequeño puerto pesquero donde observarás las barquitas de colores y podrás disfrutar del delicioso pulpo a feira. Los principales bares y restaurantes los encontrarás en la plaza de la Constitución, por la Rúa Real que queda paralela al Puerto. Aquí podrás disfrutar de una Estrella o un vaso de Albariño acompañado de una ración de vieiras, pulpo a feira o unas espectaculares zamburiñas.

Foto de tourdegalicia

Otros puntos importantes también son el Castillo de San Carlos que alberga el Museo de la Pesca; disfrutar de sus magníficas playas en verano, la más popular es la Langosteira que queda en la entrada al pueblo; y si quieres ir a los alrededores, puedes coger el coche y llegar a la cascada de Ézaro, exactamente a 30 minutos, que además es el lugar más fotogénico que ver de Finisterre a Muros.